Los símbolos del templo de Apolo en Delfos.

El dios Apolo fue de pequeño un niño extraordinario; cuentan que fue criado con néctar y ambrosía -la comida de los dioses- y que se quitó los pañales tan pronto como se los pusieron. Pero, además, ya de mayor juró que siempre amaría la música de su lira y que anunciaría la voluntad de Zeus a los hombres. Para esto último fue necesario, por lo tanto, crear su propio oráculo, eligiendo para ello el paraje de Delfos, al pie del monte Parnaso.

Allí estaba el ónfalo -que significa "ombligo"-, marcando el punto medio exacto de la superficie de la tierra. Tenía forma cónica, como una colmena, y cubierto de cintas de lana -que a veces se grababan en ella.

Fue Zeus quien encontró el centro exacto del mundo, cuando evió dos águilas desde lugares opuestos de la tierra al mismo tiempo y esperó a ver el lugar en el que se encontraban. Por eso estas aves se asocian siempre a Zeus.

Pero además el santuario de la pitonisa de Delfos contaba con un trípode, que era su asiento, excavado bajo el templo del dios, y allí estaba ella mientras pronunciaba los oráculos en un estado de trance. Se decía que Apolo se comunicaba con ella en las profundidades, pero en un lugar elevado del suelo. La pitonisa era siempre una mujer virgen de Delfos, y permanecía al servicio del dios para siempre.

2 aportaciones:

La Guardiana del Faro dijo...

Como siempre , un verdadero placer leerte. Me encanta volver a clase.

Un caluroso saludo

Negrevernis dijo...

¡Bienvenida de nuevo!