Las torrijas.


Igual que pasa en tiempo de Reyes, cuando lo típico en España es degustar el Roscón, ahora en Cuaresma podemos -puedo- disfrutar de otro estupendo postre: las torrijas, ese dulce hecho a base de pan del día anterior, bañado en leche y rebozado en harina, azúcar y canela.

Es un postre internacional, que se puede degustar en varios países europeos (Alemania, Francia, Suiza y Portugal -donde se comen en Navidad-), con algunas variantes, como preferencia por bañarlas con almíbar.

Sobre su origen hay varias ideas, ya que parece que los romanos conocían un postre similar, consistente en tortas o galletas de trigo bañadas en leche, fritas en aceite y servidas con miel, y a lo largo de toda la Edad Media hasta hoy están presentes en la cocina de los conventos, tal vez como un medio para aprovechar el pan duro del día anterior.

Algunos, además, le dan un significado religioso, ya que en época de Cuaresma es tradicional no comer carne y las torrijas, bien colocadas en su fuente, parecían de lejos carne asada o, según otros, el pan duro representa el cuerpo de Cristo, que se rompe y da en la Cruz, mientras que el baño de leche representarían abluciones rituales o un nuevo bautismo del creyente que se va a encontrar con el Señor...

Sea como sea, la receta básica de las torrijas es muy sencilla -yo, que no soy mucha ducha en la cocina, tengo mano con ellas- y hay muchas variantes (almíbar, miel, vino, con naranja, de panetone, crujientes,...), como puedes ver pinchando aquí o aquí. Por su alto contenido en azúcar no son aptas para diabéticos, aunque hay recetas similares para ellos, como dice aquí.

2 aportaciones:

Angie dijo...

Hola! Entonces si te sientan mal,esque Jesús se ha enfadado contigo?jejeje lo ideal esque no tengan demasiado aceite. Mi madre desde que me sentaron mal cuando era peque, pone un trozo de papel de cocina en el plato antes de servírlas. Y funciona!

Negrevernis dijo...

Hummm.... Yo también pongo un papel debajo.