Fue la última de los suyos: la última lágida, la última de los Ptolomeos. Cleopatra VII Filópator (69 -30 a.C) fue la única de su familia en preocuparse por hablar el idioma egipcio, pues su padre le había educado en la cultura, costumbres e idioma griegos -como correspondía a sus orígenes.
Pero además brilló con luz propia como mujer especialmente culta en la época, pues hablaba varios idiomas y sabía Historia, Literatura, Medicina y dicen que hasta latín. Dicen de ella, además, que destacaba no por su hermosura física, pero sí por sus habilidades sociales, su espontaneidad, buena conversación y equilibrio emocional.
Accedió al trono con dieciocho años, siendo obligada a casarse con su hermano, ocho años menor. Pero todas las decisiones las tomó ella, lo cual, unido a que al principio colaboró con los romanos, no le granjeó muchas simpatías. Pero Cleopatra era, sobre todo, una mujer dedicada a la política. Por eso, cuando su hermano y sus aliados la exiliaron, no dudó en aliarse con Julio César -el hombre con mayor peso político del momento-, enemigo de su hermano, buscando recuperar su trono -acabó asesinando a su hermano- y evitar la caída de Egipto en manos romanas.
Y nació Ptolomeo XV César de esta unión... La idea de Cleopatra era fundar una nueva dinastía a partir de este niño, pero el asesinato de César acabó con este proyecto. Intentó rehacer su idea aliándose con el general romano Marco Antonio, el hombre que controlaba para Roma el Mediterráneo Oriental; y de esta unión nacieron dos mellizos... Cleopatra necesitaba ayuda militar y Marco Antonio, sus riquezas.
El proyecto final de Cleopatra, salvar a Egipto de las garras romanas, no pudo realizarse al final. Sus tropas, junto a las de Marco Antonio, fueron arrasadas por Octavio, el general que controlaba Roma y principal enemigo de su amante. En el año 30 a.C Egipto pasaba, tras la batalla de Accio, a ser provincia romana.
Y cuenta la Historia que Cleopatra se suicidó, decidida a no dejarse caer en manos de Roma ni en el último momento. Sólo una de sus hijos llegó a tener poder político como reina de Mauritania.
4 aportaciones:
Nadie puede negar que esta mujer lo intentó todo, absolutamente todo, para salvar a su pueblo y que no cayera en las garras del imperio. Un personaje sin duda fascinante.
Un saludo.
Interesante, pero ahora mismo posteo para invocarte en mi blog ;) , necesito de tu memoria para recordarme algo :P
Un saludo,
Kratso
Cayetano,
a mí es un personaje que me resulta muy llamativo. Luchó hasta el final.
Un saludo.
Kratso,
¿ahora soy como Atenea o Clío?
Publicar un comentario