Lo de ir al médico y que, a través de un diagnóstico de los síntomas, pueda saber qué enfermedad se padece y cómo atajarla no es de hoy. Ya en el mundo griego del s. VI a.C se practicaba y defendía la importancia de la experiencia y la observación en el campo de la Medicina. Era frecuente, además, que estos médicos viajaran o colaboraran con otros profesionales extranjeros, a fin de poder conocer los síntomas y su cura en otros países, defendiendo un origen natural y no mágico o religioso a las enfermedades.
Así, el médico tenía en cuenta la observación de la tos, la temperatura, vómitos y respiración (sin auscultar al paciente, es verdad), y después procedía a informarse sobre los hábitos de vida del enfermo, la alimentación, bebida, lugar de residencia y actividades habituales. El objetivo era poder aplicar remedios naturales extraídos de las plantas o pequeñas intervenciones quirúrgicas, aunque este tipo de medicina más racional convivió con prácticas mágicas que no se dejaban de lado ante cualquier síntoma.
Así, el médico tenía en cuenta la observación de la tos, la temperatura, vómitos y respiración (sin auscultar al paciente, es verdad), y después procedía a informarse sobre los hábitos de vida del enfermo, la alimentación, bebida, lugar de residencia y actividades habituales. El objetivo era poder aplicar remedios naturales extraídos de las plantas o pequeñas intervenciones quirúrgicas, aunque este tipo de medicina más racional convivió con prácticas mágicas que no se dejaban de lado ante cualquier síntoma.
- Más sobre la medicina en Grecia, aquí.
2 aportaciones:
Cabe decir que Hipocrates fue el "creador" del agnosticismo...
Kratso, el agnosticismo no se crea. Es la actitud del que no se moja... Hipócrates era un científico, nada más -ni menos.
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