El origen de la bicicleta.

Hay noticias de que en Egipto, China e India se conocían bicicletas muy rudimentarias desde antiguo, pero es el genial Leonardo da Vinci el primero que nos deja, en 1490, un boceto de bicicleta con un sistema de transmisión por cadena, usado hoy día.

La bicicleta actual es fruto de un largo proceso histórico que puede comenzar, oficialmente, a finales del s. XVII, aunque el primer invento más o menos similar es el celerífero (1790). El francés Sivrac había unido dos ruedas con una vida, sobre la que se montaba como a caballo; se usaban las piernas para propulsarse y no tenía sillín ni manillar.


Estos son añadidos en 1816 por el alemán Drais, naciendo así la draisina. El propio inventor demuestra que funciona y es útil, a pesar de las burlas de sus conciudadanos, realizando un trayecto regional en cuatro horas, cuando andando se hubieran gastado unas quince.


A esta máquina se le irán añadiendo, poco a poco, otras mejoras, como un asiento ajustable con apoyo para el codo (1819) y palancas de conducción y pedales (1839), de forma que ya no son necesarios los pies sobre el suelo para avanzar -logrando además la velocidad de 13 km/h.

A mediados del s. XIX la familia francesa Michaux -padre e hijo- aumentan el diámetro de las ruedas de la draisina, aumentando así la velocidad de la máquina. Nace la michaulina o velocípedo -como se conoció posteriormente. Era de madera, con neumáticos de hierro y pedales en la rueda delantera, bastante más grande que la trasera; lentas, pesadas -hasta 40 kg de peso-, se fueron agigantando en el diámetro delantero hasta los 3 m, para recorrer más metros en menos pedaladas.



El cambio a neumáticos de goma en 1869 convertía a estas bicicletas antiguas en biciclós, siendo patentadas en Gran Bretaña por primera vez.

En 1886 se fijan los pedales al centro, con un cuadro rígido y transmisión del movimiento a la rueda trasera por medio de una cadena -la idea de Leonardo-, que multiplicaba la energía sobre los pedales y el número de vueltas de las ruedas. El 7 de enero de 1887 el estadounidense Th. Stevens daba la primera vuelta al mundo en bicicleta, tardando tres años. Dos años después se hacía en París la primera competición, en la que siete ciclistas recorrieron 1200 m.

  • Más sobre la historia de la bicicleta aquí y aquí.

4 aportaciones:

PACO HIDALGO dijo...

Vi este verano en Roma, en el Palacio de la Cancillería una exposición de inventos de Leonardo, y había un prototipo de bicicleta muy curioso de madera, como el que tu pones. Muy curioso tu post. Que en el año nuevo continúes con este energía y estas ganas de enseñar. Te deso lo mejor. Un fuerte abrazo.

Negrevernis dijo...

Gracias, Paco. Admito una cierta debilidad por la figura de Leonardo. Espero que los dos sigamos con energía y ganas para enseñar.
Un abrazo.

profedegriego dijo...

Querida Negrevernis, también yo, como Paco Hidalgo, tuve la oportunidad de visitar en el mes de agosto de 2010, igualmente en el palacio de la Cancillería, esta magnífica exposición de Leonardo, "Il genio e le invenzioni"; tengo ahora mismo delante de mí el catálogo de dicha exposición, abierto por la página que se dedica a la "bicicletta", donde se dice que los historiadores tienen serias dudas sobre la autenticidad de este bosquejo; de hecho, fue descubierto sólo en 1974, cuando comenzaron las restauraciones de los diseños leonardianos en la Univ. Católica de Milán, y lo atribuyeron a un alumno del artista, que lo habría copiado de un original. El dibujo se encuentra detrás de una auténtica representación anatómica de leonardo que fue escondida y censurada durante casi 500 años porque representaba ¡órganos sexuales!
Estupenda entrada sobre uno de los medios de transporte más baratos, ecológicos y saludables que existen.
Mille baci, cara amica.

Negrevernis dijo...

Profedegriego, no me extrañaría que el propio Leonardo hubiera hablado de este extraño invento y uno de sus alumnos ilustrara tiempo después las palabras de su maestro...

Un abrazo.