Los castigos eternos del Infierno griego.

Es mejor no llevar hasta la ira a los dioses griegos, pues el castigo ejemplar sufrido puede llegar a la crueldad:
  • Sísifo, hijo de Eolo y rey de Corinto, condenado por engañar al mismísimo rey del Hades y escaparse del Infierno, debe llevar rodando una enorme piedra hasta lo alto de una colina sin posibilidad de descanso o liberación, ya que, cuando está a punto de alcanzar la cumbre -y, por tanto, de pagar su castigo-, el peso de la roca le hace retroceder y debe empezar de nuevo.
  • El gigante Ticio, que intentó violar a Leto -madre de Apolo y Ártemis-, condenado a yacer tumbado con sus extremidades estiradas y atado, mientras que dos buitres le picotean el hígado.
  • Tántalo, rey de Lidia, que sirvió a los dioses la carne asada de su hijo Pélope, quiso ser como Zeus y robó la ambrosía de los dioses, fue castigado severamente. Aquí las fuentes son diversas, ya que en algunas se dice que el padre de los dioses le impuso como castigo tener sobre su cabeza una enorme piedra que se caería si intentaba coger las cosas buenas que se le ponían delante. Otros dicen que está condenado a sufrir de hambre y sed eternas, ya que permanece en un estanque lleno de agua que le llega a la barbilla y rodeado de árboles cargados de fruta, pero todo esto desaparece en cuanto intenta usarlo.
  • Ixión pretendió seducir a Hera, por lo que fue castigado siendo atado a una rueda que giraba en el aire sin descanso.
  • Las Danaides, princesas de la Argólide, asesinaron a sus maridos, y su castigo fue realizar tareas inútiles en los Infiernos, como ir a buscar agua en cántaros agujereados o llenar cuencos de agua mientras el líquido se sale por un agujero del fondo.
  • Y Ocno, castigado por elegir mal a su esposa, ya que se gastaba cada día todo el dinero que él llevaba a casa, sin saber mantener su hogar. Por eso él fue castigado a trenzar una cuerda que era constantemente devorada por un burro que estaba detrás de él por toda la eternidad...

3 aportaciones:

Kassiopea. dijo...

Crueles y cansinos los castigos. Porque estar toda la eternidad haciendo lo mismo tiene que aburrir.

Saludos.

Rukia dijo...

Curiosos los castigos, verdaderamente son peores que la muerte. Echo de menos sin embargo uno, ¿qué pasó con Prometeo? ;)

Negrevernis dijo...

Kassiopea, ¿les daría tiempo a aburrirse o sólo a sufrir?

Rukia, tienes razón. Próxima entrada, Prometeo, que por ser tan conocido bien merece unas palabras propias.

Saludos.